Äfrica Occidental: Epicentro del tráfico de drogas, por Antonio Molina

24/04/2009 | Bitácora africana

El África Occidental corre el riesgo de convertirse en el centro internacional del tráfico de drogas desde América Latina para Europa. Es lo que se deduce de un informe del jefe de la unidad antidroga de las Naciones Unidas. El cortejo del tráfico de drogas es el crimen y la corrupción, señala Antonio Mª Acosta, director general de la oficina de la ONU para las drogas y el crimen, -UNODC, en Praia, capital de Cavo Verde, archipiélago situado frente a las costas de Senegal, antigua colonia portuguesa. En una reciente conferencia sobre drogas y seguridad en la región, que ha reunido a delegados de la Comunidad Económica de los Estados del Oeste Africano –ECOWAS- y a funcionarios de la referida UNODC, una de las ponencias concluía: “El tiempo se acaba, la amenaza está extendida por toda la región.”

CÓMO ANDAN LAS COSAS POR ALLÍ

Un informe destaca que la incautación de cocaína duplica cada año. En 2005 fueron aprehendidos 1.325 kilos, en 2006, 3.161 kilos y en 2007, 6.456 kilos. Según los cálculos de la Policía antidroga, las incautaciones suponen el 10% de la droga que llega, pues no poseen aún medios adecuados de control y vigilancia. El mismo informe declara:”Al menos 50 toneladas de cocaína de los países andinos está transitando por el Oeste de África, cada año, a camino del norte, donde su valor en el mercado asciende a 2.000 millones de $ US (unos 1.500 millones de €), revendida por las calles de las ciudades europeas.”

Acosta hizo un llamamiento a la comunidad internacional, en particular a la UE, para ayudar a los países de África Occidental a recobrar el control de sus costas y del espacio aéreo, estableciendo unidades de policía especializadas en el combate al tráfico de drogas y en la investigación del crimen organizado. También se defendió la creación de un centro de inteligencia regional común a todo el Oeste del Continente.

PUNTOS DE LLEGADA Y TRANSPORTES

“La mayoría de la cocaína que entra en África desde Suramérica recala alrededor de Guinea Bissau en el norte y de Ghana en el sur. La mayoría de las drogas son transferidas posteriormente a Europa mediante “mulas” o en vuelos comerciales.” Son palabras del mismo informe de la UNODC.

Según los datos de incautaciones, la mayoría de los mensajeros aéreos proceden supuestamente de Guinea Conakry, Malí, Nigeria y Senegal con destino a Francia, España y el Reino Unido. A su llegada, la cocaína es distribuida por toda Europa, predominantemente por las redes criminales de África Occidental, entre las que descuellan las formadas por nigerianos.

TOMA DE CONCIENCIA

Esta región nunca antes había tenido que enfrentarse al tráfico de drogas, por lo que este problema la coge desprevenida y sin experiencia. Pero ya se nota la influencia en sus frágiles economías y en la corrupción de algunos altos funcionarios, además de envenenar a los jóvenes por la adicción y el crimen.

Los Ministros de interior y de Justicia de los 15 países de ECOWAS van a adoptar un plan de acción contra el aumento del tráfico de narcóticos en esta región de África Occidental.

DOS ASESINATOS EN GUINEA BISSAU

En 12 horas, el presidente, Joâo Bernardo Vieira y el general Jefe de las Fuerzas Armadas, Bautista Tagme Na Wai fueron asesinados. Fuentes del Ejército aseguran que no se trata de un golpe de Estado, que ambos hombres eran rivales a muerte, pertenecientes a etnias enemigas. Ambos habían escapado con vida de otros atentados.

Pero esta inestabilidad preocupa a la comunidad internacional, pues la debilidad institucional y la pobreza del país, situado entre Senegal y la Guinea Conakry, lo convierten en una plataforma ideal para el tráfico de drogas. Pues frente a la parte continental se encuentra el archipiélago de Bijagós constituido por cerca de una veintena de islas muy difíciles de vigilar y controlar.

Las mafias colombianas operan allí gracias a la complicidad de autoridades locales, tanto del ejército como del Gobierno. No olvidemos que se trata de una antigua pequeña colonia portuguesa de unos 36.000 kms 2 y con poco más de un millón y medio de habitantes.

¿QUÉ PASA POR MARRUECOS?

Human Rights Watch (HRW) – Observatorio de los Derechos Humanos- ha denunciado el arresto sin cargos del “altavoz” marroquí contra el tráfico de Hachís.

Chakib Al Jayari es un activista de los Derechos Humanos, que se ha dado a conocer denunciando en los medios de comunicación con su nombre y apellido y su rostro por delante, lo que muchos callan: Los tejemanejes del tráfico de hachís, que sale del norte del reino alauí, El Rif, hacia Europa, casi siempre a través de España.

El 15 de febrero fue detenido. El ministerio del Interior lo acusa por señalar sin pruebas a altos cargos del Estado, como responsables del narco tráfico. Preocupados por lo acontecido, la HRW envió una misión a Maruecos, que ha publicado un informe en que reclaman su liberación, detallando numerosos abusos e irregularidades por parte de la Justicia Marroquí, que “todavía no ha emitido cargos contra Al Jayari.”

“Si hay algo digno de crédito contra Al Jayari y todo lo que rodea este caso sugiere lo contrario, las autoridades deberían acusarlo rápidamente con delitos identificables, más allá de las acusaciones verbales y concederle la libertad provisional y un justo juicio,” afirma Sarah Lead Winston, directora de HRW en Oriente Próximo y África del Norte.

El detenido se encuentra en la cárcel de Ukacha (Casablanca) , aislado en una celda, sin derecho a radio, ni TV, ni presencia de otros presos.

El juez Yamal Serhane, que le tomó declaración el 21 de febrero, se negó a dejarlo en libertad antes del juicio e igualmente se negó a facilitar a la defensa copia de la declaración de Al Jayari a la policía, una de las principales piezas del caso. Cosa que los abogados califican de “inusual”. HRW denuncia además que están impidiendo las manifestaciones populares de solidaridad. Pocos días antes de la detención, Al Jayari había asistido en Barcelona al primer Foro Mundial de Productores de Cultivos declarados Ilícitos, mientras en su país, llevaban a cabo la mayor operación contra el tráfico de drogas, que llevó a prisión a más de un centenar de personas, casi todas miembros de las Fuerzas de Seguridad de la región norte, donde trabaja AL Jayari.

He aquí las declaraciones de Al Jayari al corresponsal de ABC, Luís de Vega, antes de entrar en prisión:”Hay implicados parlamentarios, pero no les pasa nada. Hay agentes que pagan para obtener una plaza en el norte del país para enriquecerse con el hachís, y hasta la Justicia conoce este fenómeno de la corrupción.”

En Marruecos, cuando ocurren estas cosas, muchos miran de reojo hacia el Palacio Real, pues nada, que pueda tener repercusiones sociales, acontece sin que M-6 dé su aprobación o condena. Hace unos meses, el Rey estuvo visitando esa zona del cultivo del hachís, que produce 800.000 toneladas de hierba al año. Nadie ha encontrado en los discursos reales alguna condena de esos cultivos, ni la promesa de sustituirlos por otros, como se empieza a intentar en algunos lugares de Suramérica. Entonces, ante esta realidad, yo me pregunto ¿Se trata de una estrategia no declarada de debilitar a nuestra juventud europea? ¿Con qué fines? Yo no quiero aventurar nterpretaciones…pero nuestro vecino del sur es poco de fiar…Le ha salido a su padre!

Autor

  • Molina Molina, Antonio José

    Antonio José Molina Molina nació en Murcia en 1932. Desde 1955 es Misionero de África, Padre Blanco, y ya desde antes ha estado trabajando en, por y para África. Apasionado de la radio, como él relata en sus crónicas desde sus primeros pasos en el continente africano, "siempre tuve una radio pequeña en mi mochila para escuchar las noticias". Durante septiembre 2002, regresa a Madrid como colaborador del CIDAF. En octubre de 2005 aceptó los cargos de secretario general de la Fundación Sur y director de su departamento África. Antonio Molina pertenece -como él mismo dice- a la "brigada volante de los Misioneros de África", siempre con la maleta preparada... mientras el cuerpo aguante.

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