El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha dado vía libre a Marruecos para reclamar la soberanía sobre territorio saharaui. Sin embargo, algunos aliados usuales han decidido abstenerse, entre ellos Pakistán, un país que desde su independencia se ha mostrado en ocasiones apoyando a Marruecos en el Movimiento de países no alineados y en las Naciones Unidas.
El 31 de octubre de 2025, fecha que ha dado lugar a la resolución 2797 de las Naciones Unidas, se ha considerado que “la autonomía de Marruecos era la solución más factible” para el conflicto del Sáhara Occidental. Pakistán decidió no apoyar dicho resolución y abstenerse. El proceso de promoción de la autonomía enarbolado por Marruecos crea “problemas morales y legales” para Islamabad, que defiende el proceso de autodeterminación para Cachemira.
Cachemira, una región situada entre Pakistán e India, ha sido objeto de disputa entre ambos países. Mientras que India aboga por su integración en el país, Pakistán lucha por la autodeterminación del territorio, que su pueblo decida qué quiere hacer. Tras esta abstención en el Consejo de Seguridad, Pakistán ha asegurado que no existe una disonancia moral en su posición sobre la autodeterminación. En caso de haber actuado de manera diferente, la India lo habría utilizado como apoyo “en cualquier confrontación legal o narrativa futura con sus homólogos” para poder asentarse en el territorio de Cachemira.
Pakistán defiende su posición en base a su autonomía estratégica y a una “neutralidad constructiva”. Otros países se abstuvieron en la votación, como Rusia y China, que “consideraban que la resolución se adelantaba a las negociaciones en lugar de fomentar un diálogo equilibrado”, basado en la autodeterminación de los saharauis.
Fuentes: Morocco World News – APANews
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