¿A quienes buscan engañar estos intelectuales organicos?, por Nse Ramón

10/10/2011 | Bitácora africana

De momento, queda claro que a mi ya no me pillan sus pretensiones salomónicas en cuanto a su hombre de acero.

Pero como yo no soy TODOS, la cosa quedará en que captarán a algunas mentes. Ya sea por que somos muy poco dados (los humanos…) a complicarnos la vida más de lo que ya está, o por que simplemente no sabemos que la complicación empieza en el justo momento que nos dejamos «aconsejar» por el intelectual orgánico de turno. Y repito, a mi no me captarán por que estoy hasta los huevos de impresentables intelectuales orgánicos.

Ésta carta de LOCO es como la continuación de la que le he puesto al Señor Agustín Nze Nfumu en respuesta a su misiva al único que no tuvo nada que ver con logro del «12 de Octubre de 1968». Pero si antes me había centrado en «cantarle los 40» a ese Embajador que cada vez tiene el meñique muy alto, ahora me centraré en lo que creo, a mi juicio, que esconde el mensaje que intelectuales como él esconden para captar y hacer perdurar al sufrido pueblo en su macabra idea. Ya que no es sólo que salga el tío a agradecerle a Obiang Nguema Mbasogo por la Fiesta Nacional de Independencia, sino por que también se permite el lujazo de dejar a un lado a Acacio Mañé, Enrique Nvo y otros tantos, demostrando una vez mas que el lavado de cerebro proviene de ellos, para que el pueblo viva «AGRADECIDO» a su líder por los siglos de los siglos.

Y es que ni vergüenza tienen ya algunos en usar tretas barrio bajeras para «inyectar» un obianguemismo caduco por estos tiempos que corren. Si la idea es que su hombre sea recordado para la eternidad, entonces no hace falta hacer milagros lingüisticos intelectuales para lograr que dicha idea tenga futuro, basta con ver que hasta nuestros días, y pese a todo el dinero derrochado por «maquillar» realidades, Obiang Nguema ya ha pasado a la historia como… ¿Un 2º Nelson Mandela?… ya, claro, y ahora salgan a reírse a carcajadas en silencio. Miro las tonterías que son capaces de soltar todos aquellos que por puro colaboracionismo quieren que seamos más los que nos vamos al matadero sin preguntarnos «¿Por qué no puedo elegir?». Y es que no es posible que se quiera seguir por la vía intelectual convencer a toda esa gente que ya viaja, ya lee libros, ya sabe lo que es estar indignado y ya sabe hasta ahorrar un poco de dinero para ser algún día independientes. La vía intelectual jamás irá de la mano de los que comen sin mirar a los que no comen, y que si encima alguno quiere comer como ellos, lo que hacen es buscar que la comida sea una miseria y así asegurarse de que la salud nacional sea cada vez más pobre. El intelectual orgánico, de los que ahora sobran en el pequeño paraíso llamado «BÉSÉ», quiere «obligar» con palabras sabias a los que «no lo ven claro» a seguir la senda del omnipresente líder de masas aduladoras. La tarea no es moco de pavo, ya que requiere que sean ellos los primeros que le hagan el besamanos, el lameculeo, el anofácil, el tontoculo, el vendido, el desentendido, el macara, el estúpido, el interesado, el hipócrita, el acusador, el extorsionista, a ese ser que sólo les acepta por que tienen ya muy demostrado que son capaces de tragarse «su propia mierda cuantas veces haga falta».

Y como no es suficiente para aquél que requiere de mano de obra barata para llevar a cabo un proyecto con vistas a fracasar, el intelectual orgánico sufre al ver que del bando contrario hay personalidades con el suficiente juicio para saber que «la mierda se come cuando es general… No cuando unos la ponen sobre la mesa como única alternativa». Eso asusta a los I.O, ya que sabemos todos que su inteligencia sola les ayuda a no dormir bien las noches por que el sentimiento de culpabilidad es más fuerte que la «injusta» serenidad y seguridad que ellos mismos pretenden presentar al pueblo cuando toca hacer el idiota el público. Cosas de una vida plagada de placeres inservibles, medios orgasmos en la práctica de la «paja mental», la ignorancia del valor del esfuerzo realizado en un aula y la desgracia propia de no poder dar marcha atrás por culpa de un «pacto con el diablo». Esas cosas son las que marcan la vida del que ha decidido buscar cobijo en el sobaco de un tipo con mucho sudores ajenos escondidos.

Les repito, no me van a alcanzar estos listillos. Primero por que les conozco a todos, y pese a que parece que es una lista larga de escritores, pensadores, arquitectos, doctores, abogados, maestros, artistas y demás, les juro que son todos unos «pobres diablos» que sabrán luego emular a Hermman Goerrin llegado el momento. Triste historia la de aquellos que buscan entre la basura al mierda equivocado.

Anécdota:

Yo recuerdo que antes iba para cura. Un día estando en la iglesia, vi a mi madre entre una larga fila de mujeres (las famosas y penosas achicofradias (?)…) que en el pasillo que dejan las sillas del local, caminan, con júbilo y cánticos hacia el altar para hacerle ofrendas al cura. Ofrendas que consisten en todo tipo de manjares fruto del trabajo duro de esas pobres «pecadoras» que buscan así el perdón de Dios. Luego, a la tarde, me tocaba dibujar un retrato a Felipe Gonzales por su visita a Guinea Ecuatorial, me senté con los curras y vi cómo se comían los manjares. Llegué a mi casa y mi madre, RIP, me puso un plato de arroz pasado de agua, un trozo de sardina y me dijo de compartirlo con mi hermano menor. Fue ese el principio en el que para mi Dios se fuera a tomar por saco… ¿Que por qué tengo que contarles esto que no tienen nada que ver con el resto de la carta de LOCOS?

Pues, lean, sigan leyendo y hagan esfuerzos por entenderme.

Nsé, ofreciendo aire a los intelectuales orgánicos.

Autor

  • Nse, Ramón

    Nse Ramón o Ramón Esono Ebalé (alias Jamón y Queso) es un artista guineoecuatoriano nacido en Nkoa-Nen Yebekuan (Mikomeseng-Kie Ntem) en 1977 y residente en Malabo desde 1982. Dibujante e ilustrador autodidacta, compagina su pasión por el dibujo y el cómic con su trabajo de grafista. Actualmente es el grafista titular del Centro Cultural de España en Malabo y como dibujante de cómics ha ganado varios premios y certámenes internacionales como el concurso "Regarde 9", en el Festival Internacional de BD de Angulema (Francia), el premio obtenido en Cocobulles, Costa de Marfil con el trabajo "Le réveil d'Akoyo". Ha expuesto en los Centros Culturales Francés y Español en Malabo y Bata, en el Feshcary (Camerún) y en diversas galerías de Europa, América y Estados Unidos. El artista ha iniciado diferentes proyectos para organismos internacionales que operan en Guinea Ecuatorial realizando carteles e ilustraciones para la campaña de la Unión Africana en fomento de la Juventud y sus Derechos de la Organización de la Unión Africana.

    Participó en ARCO2010 con dos series ácidas y corrosivas sobre las dictaduras y la corrupción

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