El primer periódico satírico de Túnez

18/10/2011 | Crónicas y reportajes

El primer semanal satírico de Túnez, “El-Gatous”, centra todas las miradas, mientras el país del norte de África celebra unas votaciones históricas este fin de semana, después de la expulsión del dictador Ben Ali, el pasado mes de enero.

El fundador del periódico semanal, que se traduce como “gato” en el dialecto local, es un veterano periodista, Slim Boukhdir, que fue detenido y encarcelado muchas veces durante los 23 años de gobierno de Zine el Abidine Ben Ali, pero nunca dejó de ser crítico.

“Utilizamos el humor para reflejar la actual situación de Túnez, para intentar reír o sonreír por las cosas más serias. Es nuestra arma contra el miedo”, declaró.

Boukhdir, al que le gusta llamarse a sí mismo “El-Gatous”, dice que el periódico puede servir como garra contra el regreso de la represión”.

“Es cierto que yo y mis colegas no estábamos en posición de expulsar a Ben Ali, pero al menos le ocasionamos alguna que otra noche sin dormir, desvelando su papel en la represión y la corrupción generalizada”, señaló.

Boukhdir lanzó la revista hace ocho meses, después de que Ben Alí y su mujer huyeran al exilio en Arabia Saudí, a mediados de enero, después de semanas de protestas populares contra su gobierno autocrático.

Salem, un vendedor de periódicos en el centro de la capital de Túnez, dice que las primeras tres ediciones se agotaron enseguida “nunca habíamos visto nada como esto”.

Pobreza y corrupción

El periódico semanal cuesta 500 dinares tunecinos, y Boukhdir, que también tiene un blog y escribe para varias páginas de internet, dice que aumentará su circulación, a más de las actuales 10.000 copias vendidas.

En el último número aparecen el líder fugitivo de Libia Muamar Gadafi y el líder sirio, Bashar al Assad haciendo llamadas a Túnez, para ser juzgados aquí porque, según Boukhdir, “aquí no hay juicios de verdad contra los ladrones y criminales”.

Ben Ali, que antes estaba plenamente respaldado por occidente por su supuesto papel como un muro contra la islamización, huyó a Arabia Saudí un mes después de que comenzase el levantamiento popular de los tunecinos contra la injusticia social, la pobreza y la corrupción. Las revueltas de Túnez desencadenaron la “Primavera árabe” en la región, que desde entonces han derrocado a los líderes de El Cairo y de Trípoli, y todavía amenazan a otros.

Ahora, después de una corta transición marcada por las protestas contra el camino del cambio y esporádicos brotes de violencia, los tunecinos tendrán la ocasión el día 23 de octubre de cambiar su destino en las primeras elecciones de la era post revolución en el mundo árabe.

Libertad de expresión

La libertad de los medios ha sido mirada con lupa en Túnez, después de los ataques y alguna manifestación contra una cadena de televisión por emitir una película considerada ofensiva por algunos musulmanes.

El día 15 de octubre, el partido islamista Ennahda, considerado el favorito para ganar las elecciones, condenó el ataque a la sede de la televisión Nessma, en día anterior, y negó cualquier implicación en la violencia. Pero el jefe del partido Ennahda, Rached Ghannouchi, también acusó a la cadena de televisión de “provocar”, por haber emitido la película animada.

La película, aclamada en el mundo entero sobre la revolución de Irán en 1979, ofendió a muchos musulmanes porque presenta una imagen de Dios como un hombre anciano con barba. El Islam prohíbe cualquier imagen de Dios.

(News 24, 18-10-11)

Autor

Más artículos de Administrador-Webmaster