Los derechos humanos son aquellas libertades, facultades, instituciones o reivindicaciones relativas a bienes primarios o básicos que incluyen a toda persona, por el simple hecho de su condición humana, para la garantía de una vida digna. Son independientes de factores particulares como el estatus, sexo, orientación sexual, etnia o nacionalidad; y son independientes o no dependen exclusivamente del ordenamiento jurídico vigente»
No se crean, no lo he escrito yo, lo acabo de copiar de wikipedia. Pero es igual, sirve para lo que quiero escribir yo.
Todos en Guinea Ecuatorial tenemos los mismos derechos. Obiang Nguema Mbasogo y su familia y sus acólitos, aunque no lo crean algunos de momento, tienen exactamente los mismos derechos que exigen los que han sufrido en sus carnes o en el seno de sus familias la barbarie perpetrada por esa gente tan mal vista por todos nosotros en su ejercicio del poder absoluto. Yo personalmente les concederé ese derecho cuando tengan que responder ante una justicia que puede «equivocarse» y que puede llegar a ser «imparcial» (visto lo visto…). No digo que vayan a acabar mal o que resulte fácil llevarlos ante los tribunales o cosas así, lo que intento decir, es que si de repente la oposición se hace fuerte, se mantiene unida nacional y finalmente consiguen que no haya una guerra civil, a los Obiang & CO, les tocará un juicio con todas las garantías, donde encima se pondrá a prueba la capacidad de implantar la DEMOCRACIA en las mentes de aquellos que los vayan a juzgar dejando de lado las rencillas personales, las venganzas y los ajustes de cuenta que muchos ahora anhelan con ímpetu. Sabremos, el pueblo, si de verdad nos preparamos bien durante la dictadura para vivir en una democracia donde el respeto, las libertades y la justicia sean lo primordial. Es un panorama muy difícil para un país africano. Sobre todo un país que vive con sus números de desarrollo económico haciendo vibrar a Wall-Street, al FMI y a las grandes empresas multinacionales que son los que dictan cuando hay «crisis mundial o cuando no la hay. Cuando hay dictador amigo y cuando hay dictador enemigo, entre otras lindeces…». sin contar con los paraísos fiscales, los lobby y los lameculos que abanderan la democracia occidental como modelo de vida perfecta. Demasiados intereses metidos en un pequeño país de menos de 1 millón de habitantes y con una renta per capita de muchos ceros a la derecha. Implantar la democracia en las mentes de los guineoecuatorianos va a requerir no solo de una hazaña sin precedentes en la historia de las democracias para todos los actores que vayan a llevar las riendas del nuevo régimen, también va ha ser una obligación para el pueblo llano asumir esa democracia tan diferente a la dictadura a la que están acostumbrados. Todos esos intereses económicos arriba citados jamás han conseguido derribar a un pueblo unido, lo más que suelen conseguir cuando un pueblo unido les planta cara, es replantearse la estrategia a adoptar frente a esa unidad y buscar puntos flacos. Por que la unidad de todas las mentes, ya sea de una familia (fíjense en la familia Obiang Nguema Mbasogo), una comunidad (fíjense en los demócratas de todo el mundo) o un pueblo (fíjense en los hijos del magreb), es la que consigue que los cambios sociales de nuestro mundo se produzcan. Muchas veces se encuentran fisuras en esas unidades por que tampoco podemos evitar contar entre nuestras filas con personas que tienen un nivel bajo de compromiso con la causa, muy bajo, y de ahí el dicho «una manzana podrida…», esas fisuras existen en el mundo de la política y del dinero a través de gente que quiere vivir una vida un poco más «exquisita» que los demás, olvidándose de que la causa es para todos y que nadie debe tampoco creerse de que se le limita su capacidad de sobresalir entre la muchedumbre. Si el talento fuese cosa fácil de descubrir, todos seríamos grandes personajes. Por eso, las personas que pueden destacar más que el montón, deben tener en cuenta al llegar a la cima que las raíces que permiten su mantenimiento en las alturas están sólidamente plantadas entre aquellos trabajadores y trabajadoras que hacen de una sociedad, de una comunidad, de un pueblo la esencia misma de la UNIDAD. Pero claro, los más pobres del «espíritu de la unión» prefieren pisar con zapatos de armani a las demás cabezas que descubren ese mismo talento o don de destacar entre el montón.
La UNIDAD es la clave, como clave es la DEMOCRACIA ante cualquier sistema obsoleto implantado en nuestras sociedades. Muchas muertes, muchas injusticias, muchas faltas de libertades, todo eso se ha ido viendo a lo largo de la historia de los pueblos. Pero como ya antes dije, la unidad siempre fue el contra poder perfecto para desbaratar todas esas insignificantes razones que tienden a doblegar y subyugar al pueblo. Los DERECHOS HUMANOS a día de hoy están ratificados por la inmensa mayoría de países del mundo. Algunos más que otros lo han hecho de verdad, otros lo han hecho con una hipocresía digna del Vaticano (soy ateo) y muy pocos lo han hecho pensando que así se le verá mejor en occidente (gobiernos extremadamente brutales han jugado a cambiar recursos naturales por el silencio de los que pueden denunciar). ¿Qué les voy a contar yo?, ¿qué les puede decir uno que saca la información inteligente desde wikipedia?… está claro, nada nuevo.
En Guinea Ecuatorial, territorio habitado por varias etnias, la UNIDAD es primordial ante todo. Yo cuento personalmente con los hijos de Niefang, Akurenam, Nsork, Ebebiyín, Mongomo, Cogo, Evinayong, Añisok, etc., para cerrar posibles fisuras que vayan apareciendo, junto a otros grupos étnicos de mi país y presentarse ante el mundo devorador de las almas libres como una sola persona, un solo espíritu, un solo ideal. A los dinosaurios implacables de Occidente y Norteamérica hay que dejarles un mensaje claro como el que les desde el magreb. Hay que convencer a los que dicen «no podemos contra ellos…» para que empiecen a ver que somos todos hijos del país que nos da mucho más de lo que nos dejan ver los cuatro gatos. Esa es la UNIDAD que le está faltando al amigo SEPARATISTA, esa es la unidad que le está faltando al hermano que cree que hay que romper con los lazos y escoger caminos separados. Es verdad que un régimen tan asqueroso como el NUESTRO, las minorías sufren y son las más desamparadas, pero ¿QUE IMAGEN LE VENDEMOS AL HERMANO DE LA OTRA ETNIA CUANDO NOS PRESENTAMOS COMO SEPARATISTAS? ¿COMO VAN A REACCIONAR LOS QUE TIENEN PARENTESCOS CON LAS OTRAS ETNIAS Y VINCULOS BASADOS EN LOS SENTIMIENTOS PUROS Y NOBLES? ¿QUE LE DIGO YO A MI HIJO O A MI MUJER, O A MI CUÑADO, O A MI HERMANO NACIDO DE UN PROGENITOR MIO CON OTRA PERSONA DE OTRA ETNIA? ¿QUE JUSTICIA SE PUEDE PEDIR CUANDO LA IDEA PRINCIPAL ES «EXPULSAR» A LOS QUE AHORA TIENEN LAS MISMAS DESGRACIAS CAUSADAS POR LA MINORIA DE SU ETNIA?.
Por lo tanto, tomo un giro en mi búsqueda de la libertad para el pueblo de Guinea Ecuatorial: Antes de continuar con las críticas al régimen de Obiang, voy a centrar mis esfuerzos en convencer a los que buscan separar las mentes de todos los que añoramos un objetivo común. O arreglamos este punto fatídico ahora o esperamos a que el reinado de los que nos comen el alma se acabe algún día para retomar este tema de las separaciones étnicas.
Aclarar también que el único que le ha puesto realmente pelotas a la cosa es ANNOBONÉS, su pueblo vive casi olvidado en una isla muy alejada de las costas de Malabo y Bata, todos sabemos de las penurias que tienen que pasar para poder obtener lo más básico para su subsistencia. SI ALGUN DIA TOCARA DEFENDER LOS IDEALES DE LOS DEMAS GUINEOECUATORIANOS, CREANME QUE ME POSICIONARE DEL LADO DEL QUE ESGRIME LA VERDAD, LA JUSTICIA Y LA UNIDAD DE TODOS LOS PUEBLOS DE GUINEA ECUATORIAL (y luego veremos si me enfundo la chaqueta del «CHÉ»)
Nsé, hijo de Guinea Ecuatorial, nacido en Nkoa-Nen Yebecuan, Mikomeseng, Kie Ntem. Educado durante 32 años en Malabo Bioko Norte, Cuñado de JC Dougan Sule y de Carlos Oná Boriesá. Padre de JG Esono Dougan, cuyo padrino es Manuel Biribé Sibacha. Casado con una Vaello Marco, padrinos de mi boda Makuandjito Ngongolo Bocay y Eulogio Roku Mbuña. Vivo ahora en Asunción (Paraguay) donde mi hijo está aprendiendo a hablar guaraní.
Si alguien osa romper estas ramas familiares internas y externas que con mucha alegría y amor hemos creado mis hermanos, amigos y yo… juro que no respondo. Así están las cosas cuando se huele a SEPARATISMOS INUTILES.
