Las fuerzas de seguridad senegalesas se han visto obligadas a dispersar a las multitudes que se han congregado en Dakar, la capital del país, como protesta contra el aplazamiento de las elecciones presidenciales previstas para el 25 de febrero.
El presidente Macky Sall anunció el sábado que la votación se retrasaría indefinidamente debido a una disputa sobre la lista de candidatos, decisión que fue rechazada y contestada por los partidos de la oposición que han llamado a movilizaciones masivas.
Unos 200 manifestantes bloquearon el tráfico de la principal avenida de la capital con neumáticos ardiendo antes de retirarse a calles laterales cuando la policía antidisturbios disparó gases lacrimógenos.
Las autoridades aún no se han pronunciado sobre la situación, lo que genera incertidumbre sobre lo que ocurrirá a continuación y puede alimentar la virulencia de los disturbios.
Senegal ha sido considerado durante mucho tiempo como una de las democracias más estables de África Occidental, pero los recientes acontecimientos políticos en el país han suscitado inquietudes. Tras el anuncio de Sall, la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) expresó su preocupación por las circunstancias que rodeaban el aplazamiento e instó a que se determinara con prontitud una nueva fecha para las elecciones.
Fuente: Senenews – Imagen de Cuerpo: Wikimedia Commons
[Traducción y edición, Gabriel Castro]
[CIDAF-UCM]
