La Asociación de Miembros de la Conferencia Episcopal de África Oriental (AMECEA) ha celebrado un taller en el que, entre otras cosas, los participantes tuvieron la oportunidad de discutir diversos temas relacionados con las Resoluciones Episcopales sobre la Protección del Medio Ambiente Laudato si’ y el desarrollo de estrategias conjuntas para su implementación.

El taller fue organizado por la Conferencia Episcopal de Tanzania (TEC) e involucró a directores de la Comisión de Justicia y Paz (JPCD) y coordinadores de Caritas de las conferencias, incluidos los anfitriones Tanzania, Kenia, Uganda, Malaui, Zambia, Sudán del Sur y Zimbabue.

Al explicar los objetivos del Taller, el coordinador para la Promoción del Desarrollo Humano Integral (PIHD) de AMECEA, Paul Igweta, declaró que el taller tenía como objetivo reunir a los participantes para discutir cómo implementar las resoluciones de Laudato si’ abordadas por los obispos de AMECEA durante la 20ª Asamblea Plenaria de AMECEA celebrada en Dar es Salaam, Tanzania, el año pasado.

Igweta solicitó a los participantes durante el taller que compartan lo que se ha logrado en sus conferencias como parte de la implementación de las resoluciones, los desafíos, la evaluación general y propongan estrategias conjuntas para lograr una mayor implementación.

“En sus resoluciones, los Padres de AMECEA se comprometieron a asumir la responsabilidad del pastor de proteger a sus creyentes y a los de buena voluntad, cumpliendo su deber de obispos individual o colectivamente, para responder al grito de la tierra y al grito de los pobres mediante la utilización de los recursos naturales existentes en beneficio de las generaciones actuales y futuras”. (Paul Igweta)

Según Igweta, estos principios deben estar guiados por la dignidad humana, el bien común de toda la humanidad, la gestión ambiental, la conservación, la simplicidad, la participación en el Estado de derecho y la conversación ecológica.

En su discurso de apertura, el secretario general del TEC, Charles Kitima, pidió a los participantes que utilicen sus profesiones y talentos para cumplir con los deberes de los obispos de la región en materia de protección del medio ambiente, teniendo en cuenta que, por su cargo y deberes, son directamente representantes y embajadores de los obispos, insistiendo en que los participantes deberían considerar los valores de la Iglesia católica al transmitir el mensaje a la comunidad:

“Distinguíos de otros grupos… sois representantes de la Iglesia, por lo que vuestra voz y vuestras metodologías deben reflejar los valores de la Iglesia católica… evitad utilizar los métodos de los activistas”

Kitima alentó a los participantes a involucrar a las múltiples partes interesadas, empezando por los niveles inferiores, dándoles la oportunidad de compartir sus opiniones y decisiones:

“En la implementación de Laudato si’, el conocimiento indígena es importante… por eso es necesario involucrar a los miembros de la comunidad en todos los niveles de las comunidades… no debemos dejarlos de lado ignorando sus ideas, si hacemos eso, al final, no lograremos alcanzar los objetivos previstos”.

Benard Mberere, oficial de proyectos en la secretaría de AMECEA, compartió sus comentarios sobre la investigación realizada en la región en relación con la implementación de Laudato si’, señalando que la investigación se llevó a cabo en varios grupos sociales, incluidos líderes religiosos, coordinadores de justicia y paz, pequeños comunidades cristianas y jóvenes, cuyos resultados mostraron que sólo el 40 % en la región tenía una idea sobre Laudato si’.

Mberere afirmó que algunas áreas en varios países han hecho grandes esfuerzos para implementar Laudato si’ mediante la plantación de manglares alrededor de las zonas costeras (mares), la limpieza de los vertederos ubicados en las residencias, el uso de energías renovables, incluido el gas animal y el gas natural, la hidroelectricidad y la energía solar, así como el establecimiento de proyectos de gestión forestal.

Cabe señalar que en 2015 el Papa Francisco emitió la encíclica Laudato si’, la cual fue lanzada oficialmente en el Vaticano.

Autor: Dalphina Rubyema

Fuente: AMECEA

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