Más de 120 camiones cisterna de combustible comenzaron a entrar en Uganda el día 25 de enero, después de que los agentes de tránsito acordaran con las autoridades fiscales de Kenia desconvocar la huelga de brazos caídos.

Algunos informes indican que 400 camiones estaban retenidos en la frontera desde el pasado 19 de enero por la mañana.

Los conductores de los camiones y agentes de tránsito se declararon en huelga demandando la transferencia de dos funcionarios de aduanas keniatas, de la Autoridad de Hacienda pública de Kenia, KRA, a los que acusaban de retrasar el pago de sus bonos de tránsito.

Los bonos de tránsito sirven como garantía de tasas para las agencias de recaudación de impuestos, cuando las mercancías se trasladan desde Mombasa a la frontera.

La garantía de bonos actúa como una fianza, es como el ingreso que se hubiera pagado si el producto fuera vendido ilegalmente en el mercado local, y por tanto, garantiza que los productos llegarán al país al que van dirigidos.

El presidente de los agentes de Tránsito, Moses Ochieng, dice que ayer, el problema ha sido resuelto en parte, después de que la KRA garantizase al gerente regional de Kisumi y al equipo de seguridad local que intervendrían en el asunto.

“Para que los bonos sean reingresados, se supone que te tienen que dar un certificado de exportación en el punto de salida. Sin esos certificados, ni siquiera los camiones de gasolina o diesel pueden cargar sus productos, porque los agentes de tránsito no tienen los suficientes bonos”, explica Ochieng.

Richard Kamajugo, el Comisario de la Autoridad de Hacienda de Uganda para las aduanas, dice que la KRA ha informado que el retraso en la devolución del bono de tránsito era debido a un error electrónico.

“Esto es una postura de retroceso para las autoridades. Siempre existe el peligro de desvío de esos productos sin pagar impuestos, si son vendidos en el mercado de Kenia”, afirmó Kamajugo.

Más retrasos de este tipo podrían suponer un riesgo de escalada del precio del combustible por todo el país, debido al bajo abastecimiento porque según Kamajugo, “la mayoría de los camiones bloqueados por la huelga eran cisternas de combustible”. Los precios del combustible ya son altos en estos momentos.

(New Vision, Uganda, 26-01-11)