Ruanda , Elecciones presidenciales: Kagame triunfa (2) , por Antonio Molina

8/09/2010 | Bitácora africana

Es el único modo de establecer el sentimiento de unidad nacional.
Con esta misma energía se ha lanzado en la reconstrucción del país, que tiene el “handicap” de no tener salida al Océano Índico y de sólo poder exportar algunos productos agrícolas en pequeñas cantidades, como el café y el te. Pues Ruanda no posee riquezas minerales como el vecino Congo Oriental. Todo lo que exporta es contrabandeado, pues militares ruandeses esclavizan a la población de esta región del Congo, explotando las minas de coltán, de oro y de diamantes. Como saben el coltán es necesario para los teléfonos móviles, por eso los Estados Unidos, Inglaterra, Francia y otros países occidentales miran para otro lado, cuando se acusa a Kagame ante las instancias de la ONU.

BUENA IMAGEN INTERNACIONAL

El banco Mundial señala a Ruanda como un ejemplo de buen gobierno, ejemplar en su lucha contra la corrupción. De hecho, hasta los enemigos de Kagame reconocen la transformación urbanística que ha sufrido la capital, en estos últimos años. Aunque en los pueblos del interior se nota menos.

Además, Kagame tiene “amigos” como Tony Blair, ex primer ministro británico y el antiguo presidente de los Estados Unidos, Bill Clinton, que lo consideran como “un líder visionario”.

El mismo Kagame respondía al periodista norteamericano Philip Gourevicht, en entrevista publicada en el periódico “New Yorker”, lo siguiente: “Si yo no consigo establecer las instituciones que me permitan retirarme en 2017 transmitir pacíficamente el poder, entonces reconoceré que he fracasado.”

Mientras tanto, a pesar de las divisiones internas del FPR, que subrayan los diplomáticos en puesto en Kigali, nada deja suponer que Paul Kagame cambiará sus métodos de gobierno, que hasta ahora le han dado buenos resultados.

CONFIRMACIÓN DE ÚLTIMA HORA

Veamos como en Kigali tienen bien rodado y engrasado el método operativo de represión del poder. A los ataques con granadas en ciertos barrios de la capital, ha seguido el arresto de algunos oficiales superiores del ejército, como instigadores de los mismos.

Señales características comunes: Todos son antiguos compañeros del maquis, que lucharon para liberar al país del régimen extremista hutu. Todos vinieron desde Uganda, en cuyo ejército se formaron, penetrando como invasores por el norte del país.

El coronel Rugigana Ngabo es la última víctima de este escenario estaliniano, que establece que la revolución debe devorar a sus hijos. Según la unidad antiterrorista del régimen de Kagame, habría sido él el responsable de los ataques con granadas después de las elecciones. La inculpación es evidente: TERRORISMO. Su única posibilidad sería escapar de las garras de Kagame, como hizo su hermano, ex jefe de estado mayor del ejército ruandés, general Kayumba Nyawasa, refugiado político en Suráfrica y víctima de la última tentativa de asesinato durante la celebración de la Copa Mundial de Fútbol.

Esta relación familiar sugiere otra interpretación al arresto de este coronel. Paul Kagame ha diseñado un plan diabólico, para eliminar a todos aquellos que representen cualquier peligro para su poder absoluto. Sus antiguos colegas del FPR, por saber demasiado y por sus críticas, están en el punto de mira. Ellos lo saben. Por eso nos preguntamos ¿porqué el coronel Rugigana se ha dejado atrapar tan idiotamente en la trampa? ¿No ha tenido en cuenta que el hecho de ser hermano del general Kayumba era motivo suficiente para correr peligro? ¿Se creía él tan “limpio”, que pensaba estar al abrigo de toda persecución?

En principio, todos los que pueden ser agentes de intermediación entre los militares refugiados o exilados en el extranjero y la ‘quinta columna’ interior de la oposición, son a priori hombres eliminables. Nadie mejor que el coronel Rugigana para saber lo que está ocurriendo en el interior de la cúpula del ejército ruandés y las rivalidades entre “históricos” y “cachorros” por el poder.

En el régimen de Kagame, los últimos en llegar se están infiltrando entre los de la primera hora. La intención de Kagame es clara: Pretende una transición generacional, eliminando progresivamente del FPR a los militares históricos. Por eso nos preguntamos, si el coronel Rugidaza Ngabo tenía espíritu suicida.

Lo más probable es que una vez abortado el atentado contra su hermano el general Kayamba, no se excluye que Kagame haya querido contentarse con el hermano para atemorizar a la familia.
Nos preguntamos: ¿Cuándo terminará esta caza de brujos? Nadie lo sabe por ahora. Esto desvela que Kagame, a pesar de haber sido elegido por un “porcentaje soviético” del 93%, no se siente seguro después de cenar. Cada noche cambia de alcoba.

Después de la prisión del coronel Rugigana, cualquier otro colega histórico puede caer en desgracia. ¡Es tan fácil mandar lanzar una granada y luego acusar a la víctima de turno! Con una justicia sometida al régimen, los falsos testigos se compran por poca cosa.
De lo que no parece sospechar Kagame es que con su modo de proceder está preparando una columna armada en el exilio, cosa que puede complicarse con la complicidad de otra “quinta columna interna” de momento silenciosa, pero que espera la ocasión propicia para protagonizar una nueva revolución. Esperemos que no sea un nuevo genocidio…

CONCLUSIÓN

La solución sería que la buena imagen de este frío dictador sanguinario, que alguien comparó a Mefistófeles, se vaya evaporando en los ambientes internacionales, que en la ONU deje de ser vicepresidente del Comité de Lucha contra la Pobreza, cuya otra vicepresidencia ostenta nuestro Zapatero.

(¡Menudo par para acabar con la mitad de los pobres del mundo hasta 2015!)

En este dominio es muy importante la acción emprendida por un grupo de ONGs españolas y de Fundaciones como FUNDACIÓN SUR-África y asociaciones como UMOYA, Comités de defensa del África Negra, etc…
Por medio de las modernas técnicas electrónicas, como INTERNET y e-mails se pueden lanzar campañas de extensión mundial, para que LOS PRESIDENTES EN EJERCICIO TAMBIÉN TENGAN QUE RENDIR CUENTAS ANTE TRIBUNALES SUPRANACIONALES, sea en la ONU, en la Unión Africana o en la Unión Europea.

Pues cuando se trata de CRÍMENES DE LESA HUMANIDAD no se trata de asuntos internos de un país. La responsabilidad es MUNDIAL.

Autor

  • Antonio José Molina Molina nació en Murcia en 1932. Desde 1955 es Misionero de África, Padre Blanco, y ya desde antes ha estado trabajando en, por y para África. Apasionado de la radio, como él relata en sus crónicas desde sus primeros pasos en el continente africano, "siempre tuve una radio pequeña en mi mochila para escuchar las noticias". Durante septiembre 2002, regresa a Madrid como colaborador del CIDAF. En octubre de 2005 aceptó los cargos de secretario general de la Fundación Sur y director de su departamento África. Antonio Molina pertenece -como él mismo dice- a la "brigada volante de los Misioneros de África", siempre con la maleta preparada... mientras el cuerpo aguante.

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