Jean-Luc N’dreman es el secretario ejecutivo nacional para la educación católica en Costa de Marfil. En esta entrevista con La Croix Africa, hace balance de la reforma de la educación católica lanzada en 2017 por la Conferencia de Obispos Católicos de Costa de Marfil (Cecci) y analiza los arreglos realizados por las escuelas católicas para el inicio del año escolar 2020-2021.

La Croix Africa: Con la crisis sanitaria ligada a la pandemia del Coronavirus y una delicada situación económica, ¿cómo han mantenido los puestos de trabajo y obtenido buenos resultados para el curso 2019-2020?

Jean-Luc N’dreman: Cuando Costa de Marfil fue golpeada por la pandemia de coronavirus, las escuelas fueron las primeras víctimas. Cerraron desde los primeros días y nadie sabía cuándo iban a reabrir. Estábamos preocupados y comentamos nuestras preocupaciones a los obispos. Nos tranquilizaron diciéndonos que en estos tiempos de prueba, no se trataba de que la Iglesia abandonara a sus hijos. Entonces, a pesar de las dificultades, hicimos esfuerzos para mantener los puestos de trabajo y pagar al personal, cada uno según sus medios. Esta generosa decisión de los obispos hizo posible salvar la educación católica y creo que eso es lo que justifica los buenos resultados que hemos obtenido a pesar de esta situación de crisis sanitaria. Todos se organizan según sus realidades para la formación de los estudiantes. También cabe destacar que en las escuelas católicas trabajamos a conciencia desde el inicio del curso académico. Como resultado, los estudiantes ya tenían un buen desempeño en marzo cuando ingresaron al confinamiento.

La Croix Africa: ¿Dónde estamos con la reforma de la educación católica lanzada en 2017 por la Conferencia de Obispos Católicos de Costa de Marfil?

Jean-Luc N’dreman: En marzo de 2020 hicimos un balance de este trabajo a los obispos. Los proyectos de reforma lanzados en enero de 2017 se presentaron en forma de resoluciones. Se trataba de reformar en profundidad toda la educación católica a través de su organización, su gestión, su identidad y la formación de sus actores.

Con respecto a nuestro estatuto, una escuela católica, de acuerdo con el derecho canónico, es una escuela reconocida por escrito por un obispo. Esto supone que el obispo tiene todos los derechos sobre esta escuela y que sus directrices pastorales sobre la escuela se aplican allí. Ahora en todas las diócesis sabemos lo que es una escuela católica. En cuanto a la gestión de la organización y los fondos, se han organizado varios seminarios para brindar la formación necesaria a nuestros contables y tesoreros.

Hasta la fecha, creemos que se han cumplido nuestros objetivos. Depende de cada diócesis poner en práctica lo que estos tres años nos han permitido dar como formación a los protagonistas. Sin embargo, queda la organización del Día Nacional de la Educación Católica que nos permitirá celebrar a ciertos actores y a los mejores estudiantes por el trabajo bien hecho.

La Croix Africa: ¿Por qué la reforma ha experimentado dificultades en su implementación?

Jean-Luc N’dreman: Durante décadas, la educación católica ha experimentado una crisis que ha empañado su imagen en la sociedad. Nuestros obispos, dueños de las escuelas católicas, hicieron el diagnóstico para ponerlo en marcha. Las responsabilidades están en cada nivel y los obispos han asumido las suyas. Mucho se ha oído hablar de esta reforma. Algunos lo han llamado un plan para despedir trabajadores masivamente, recortar salarios, etc. Algunos lo creyeron, otros no. Pero una vez que los empleados vieron los primeros resultados de esta reforma, no hubo de qué preocuparse. Finalmente, todos vieron que los primeros beneficiarios de la reforma eran los empleados. Desde el momento en que la nueva organización permitió tener legibilidad y más seriedad en el manejo de los fondos, todos se tranquilizaron y entendieron que todos debían unirse a la Iglesia para que la reforma tuviera éxito. Las escuelas católicas no son creadas por los obispos para conseguir dinero, sino para permitir que la Iglesia participe en la edificación y construcción de nuestra sociedad.

La Croix Africa: Con la situación sanitaria, ¿cuáles son los preparativos de la educación católica para este nuevo curso escolar?

Jean-Luc N’dreman: Los padres de los estudiantes eligen las escuelas católicas debido a la seriedad de su enseñanza. Por lo tanto, estos padres deben respetar su compromiso con respecto a las facturas impagadas del último año escolar. Nos mantenemos atentos y seguimos sensibilizando y respetando las medidas de barrera en las escuelas: lavarse las manos, usar bufandas, etc. Este año será sin duda un año difícil porque está plagado de pobreza y enfermedades, pero debemos mantener la confianza.

Guy Aimé Eblotié

Fuente: La Croix Africa

[Fundación Sur]

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