El gobierno de la República Centroafricana (RCA) y los 14 grupos armados reconocidos del país firmaron el miércoles 6 de febrero en Bangui el acuerdo de paz que resultó en las conversaciones de diez días en Jartum.

En la ceremonia de firma, el presidente de la República Centroafricana , Faustin-Archange Touadéra, dio la bienvenida a este «momento histórico». «El primer efecto de este acuerdo es el cese de toda violencia contra civiles», declaró , y señaló que «se acercó a nuestros hermanos y hermanas de los grupos armados».

El contenido del acuerdo permanece en las sombras. Durante las negociaciones en Jartum, la amnistía de los grupos armados y el reparto del poder entre Bangui y los rebeldes fueron algunos de los temas centrales.

El Presidente del Comité de la Unión Africana (UA) Moussa Faki Mahamat asistió a la ceremonia en Bangui. «Seguimos muy atentos acerca de la implementación efectiva de este acuerdo», declaró, refiriéndose a varios acuerdos de paz que se firmaron desde el inicio de la crisis en África Central a fines de 2012, pero que en realidad nunca han sido aplicados.

Bajo los auspicios de la UA respaldada por la ONU, desde el 24 de enero, delegaciones de las autoridades de la República Centroafricana y 14 grupos armados han estado sentados alrededor de la mesa de negociaciones en Jartum para allanar el camino para de paz para este país, donde más de la mitad de la población necesita asistencia humanitaria, según cifras de la ONU. Se encontró un acuerdo el sábado pasado, luego se rubricó el martes en Jartum.

Desde Nueva York, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, reiteró el compromiso de la ONU de ayudar a la República Centroafricana «en este momento crítico», e instó a los países vecinos, organizaciones regionales y socios internacionales a Apoyar la implementación del acuerdo.

Fuente: NewsAbangui.com

[Fundación Sur]

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