La persistente violencia en la RD del Congo ha hecho que las mujeres sufran agravio y múltiples violaciones y ha puesto en peligro la vida salvaje. La inseguridad alimenticia ha hecho de la caza un medio de supervivencia.
¿Cómo afecta esta situación a la vida salvaje?
En el Congo los granes simios están desapareciendo. Se calcula que quedan unos 3.800 gorilas existen todavía en el Congo. Tanto estos como los chimpancés, que sobreviven en 24 países africanos están todos ellos considerados especies en peligro de extinción.
¿Cómo pueden protegerlos las mujeres y los niños?
Con la asistencia de organizaciones internacionales de conservación están promoviendo alternativas de subsistencia otras que la caza. Sobre todo aquellas mujeres que viven cerca de las zonas de hábitat de estos grandes simios. Algunas de estas alternativas consisten en proveer a las mujeres con mini créditos para lanzar pequeñas proyectos.
¿Qué tipo de proyectos son estos?
Por ejemplo pequeñas empresas para fabricar jabón o producir tejidos o confeccionar vestidos y ayudándoles a asociarse.
Otro medio es enseñando a las familias a a cuidar otros tipos de fuentes de proteínas como gallinas y conejos. Las mujeres, por su cuenta, han descubierto que las cobayas o conejos de indias se reproducen fácilmente. Son varias las asociaciones que ayudan a las mujeres con cursos sobre la producción y cuidado de animales domésticos y sobre agricultura más innovadora.
¿Y cómo colaboran las mujeres y los niños en el cuidado de los grandes simios?
Hay centros donde acogen a los pequeños gorilas y otros pequeños simios que han quedado huérfanos. Las mujeres hacen de madres sustitutas de estos bebés primates durante un tiempo. Los cuidan, los alimentan y los sacan a la selva para que vayan acostumbrándose a su entorno natural, hasta que los pequeños primates se sientes capaces de sobrevivir por sí solos y se sienten atraídos por su medio ambiente natural. Las mujeres reaccionan hacia esos bebes gorilas huérfanos como hacia sus propios pequeños.