El presidente de Burkina Faso, Marc Christian Kaboré, pidió el domingo «justicia para todos los casos sensibles», incluidos los casos de asesinato de Thomas Sankara, Norbert Zongo, el golpe fallido y la insurrección popular, para «ayudar a la gente a reconciliarse». «Debemos hacer todo lo posible para garantizar la justicia en todos los casos delicados para ayudar a nuestra gente a aceptar su historia, traer la paz a sus corazones y crear las condiciones propicias para la contribución de todos los burkineses a la construcción nacional», dijo Kaboré en un discurso de radio y televisión en vísperas de la celebración del LVII aniversario de la independencia de Burkina Faso. «La reconciliación nacional sigue siendo un problema importante que debemos abordar con éxito, en los mejores intereses de la nación», afirmó.

La justicia militar, una corte excepcional, debe cerrar una larga serie de casos, principalmente los del fallido golpe de septiembre de 2015 y el asesinato del «padre de la revolución» de Burkina Faso, el capitán Thomas Sankara, asesinado durante el golpe y que llevó al expresidente Blaise Compaoré al poder en 1987.

También queda pendiente el caso del periodista de investigación Norbert Zongo, asesinado en 1998 junto a tres compañeros, y que ha evolucionado con la puesta bajo control judicial de François Compaoré, hermano del depuesto presidente Blaise Compaoré, procesado por «incitación al asesinato».

Kaboré celebró «el progreso de los casos pendientes ante la justicia», y quiso destacar que «la legítima sed de justicia del Burkina Faso permanece intacta».

Fuente: africanews

[Traducción, Juan Vacas]

[Fundación Sur]

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