Como un fenómeno tras la guerra, la globalización ha influenciado profundamente las innovaciones culturales, ideológicas, científicas y tecnológicas alrededor del mundo. Hemos llegado a un punto en el que ningún país o individuo es inmune a los efectos de la globalización. En esta época, la globalización cultural se ha convertido en uno de los aspectos más importantes de la globalización.
La globalización cultural se manifiesta a través del tránsito mundial de las ideas, valores, tradiciones, ciencia, moda, nutrición e innumerables tendencias dentro de la interacción humana. Aunque la globalización cultural no es un fenómeno declarado oficialmente por las organizaciones internacionales todavía, ningún país puede establecer un proteccionismo cultural sin arriesgarse a caer en el aislamiento. El sistema económico global, las innovaciones tecnológicas y la expansión de la industria del espectáculo han llevado a un creciente nivel de intercambio cultural a nivel global que está creciendo rápidamente.
La comunicación polifacética entre culturas y la difusión intelectual del conocimiento a través de los centros de investigación mundiales e instituciones de enseñanza superior han promovido la globalización cultural. La música, los deportes, la religión, la ropa, la comida y los estándares internacionales de calidad, servicios y bienes están asumiendo gradualmente dimensiones globales.
Algunos críticos de la globalización argumentan que presenta un peligro a la diversidad de culturas debido a que una cultura global dominante se está introduciendo. Algunos dicen que la globalización significara en último término occidentalización o americanización de las culturas, donde poderosos conceptos culturales provenientes de países occidentales económica y políticamente poderosos se extiendan y devoren las culturas locales.
Muchos de los países desarrollados son vistos por muchos países en desarrollo como los que marcan el ritmo de la civilización. Hay algo de razón en esto, pero esto no significa que los países no tengan ninguna otra elección que absorber todo lo que les llega.
Etiopía no es inmune a los efectos de la globalización cultural. Aunque la globalización está influenciando toda la fábrica social de la sociedad etíope, sus efectos están lejos de ser pronunciados en las áreas de la cultura, que incluye música, moda y artes creativas entre otras áreas relevantes.
Etiopía tiene una larga tradición de historia musical. El país ha producido un gran número de instrumentos musicales indígenas y movimientos de danza de las múltiples naciones, nacionalidades y pueblos del país. Hace casi medio siglo, la música moderna fue introducida en el país a través de las bandas militares y el esfuerzo de la familia de Nerses Nalbandian, músico y educador de ascendencia armenia que se asentó en Etiopía en 1930. También introdujeron música clásica adaptada al contexto etíope. En los años posteriores, con la creación de la escuela de Música de Yared a través de la ayuda del gobierno búlgaro y del liderazgo del profesor Ashenafi Kebede, un prominente académico y músico etíope, la música moderna empezó a tomar forma en el país.
Hoy en día el desarrollo de la música en el país parece haberse desviado en el sentido de que hay una gran mezcla de música moderna con costumbres que no son familiares en este país. Por ejemplo, las camisetas y pantalones que no tienen relación con la cultura etíope están siendo usadas bajo el nombre de “atuendos tradicionales”. La situación es claramente visible en los videoclips de baile.
En el área de las áreas creativas, particularmente en las artes teatrales, hay una tendencia que puede ser definida como “un paso hacia delante, dos hacia atrás”. El número de libros escritos en lenguas locales ha aumentado, pero la juventud prefiere mirar nuevos contenidos en Internet. Un uso excesivo y la dependencia en internet y ordenadores ha llevado a los estudiantes a plagiar el trabajo de otros.
Un número de asociaciones profesionales en el campo de las artes creativas fueron creadas un par de décadas atrás, pero debido a su falta de capacidad y otros cuellos de botella, han fallado en sus objetivos. Esto añadido a la inminente catástrofe de la globalización cultural, la falta de interés entre los profesionales y las universidades en hacer investigaciones en las culturas locales a afectado negativamente el desarrollo de dichas culturas en Etiopía y las ha expuesto a ser infectadas con valores culturales externos que son desconocidos para la gente de esta nación.
También hay algunos herencias culturales benignas que Etiopía ha tratado de adaptar de otras culturas globales. Por ejemplo, la Orquesta Etíope fue una de las mejores orquestas filarmónicas y varios tipo de orquesta de cámara que se han destruido calificándolas de “cultura imperialista” y “música imperialista”. A día de hoy nuestra juventud trata de disfrutar el reggae, raga, gagnam style y otras formas de música de baile porque quieren parecer “modernos” y “jóvenes” como la juventud en las ciudades occidentales.
Etiopía debe recorrer mucho camino antes de que las viejas culturas de las naciones y sus gentes sean promovidas adecuadamente. Excepto por una minúscula escuela de música que funciona bajo la supervisión de la universidad de Addis Ababa, el país parece estar todavía lejos de tener un gran conservatorio nacional que atraiga a los jóvenes investigadores de las artes. Cuando alguien habla de la cultura etíope, debe saber que es un mosaico de culturas, naciones y pueblos. Esto le da una ventaja comparativa no solo para promover las artes sino para aumentar el turismo al país.
Por otra parte, a pesar de los peligros de la globalización, el desarrollo global de la tecnología de la información puede ser usada como una oportunidad para introducir y popularizar culturas locales e indígenas entre la comunidad global. Redes sociales como YouTube y Facebook pueden ser usadas para promover la rica herencia cultural de la gente de este país. Es un error condenar la globalización completamente como un fenómeno extranjero. Mantener un orgullo nacional cultural es algo importante, pero usar las oportunidades dadas por la globalización lo es también. Queramos o no, las generaciones venideras continuarán con la globalización. Sin embargo, todavía tenemos la elección de mantener nuestra identidad cultural como etíopes.
Fuente: The Ethiopian Herald
[Traducción y edición, Fernando Martín]
[Fundación Sur]
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