¿Puede el Gobierno etíope detener la hambruna esta vez? (3 de 4)

20/11/2015 | Opinión

¿Qué es REST?

REST es la misma organización criminal que, en 1984-85 desvío la ayuda alimentaria internacional para provecho de los militares y de los líderes del TPLF. Ya documenté en el Huffinton Post las actividades corruptas de REST en mi comentario de Mayo de 2010 «Licensed to Steal».

La actividad delictiva de REST con la ayuda para paliar el hambre desde hace más de tres décadas fue simplemente impresionante en su ingenuidad demoníaca. En el inicio de la estafa en la ayuda alimentaria en 1984, REST utilizo un proceso de engaño en tres etapas.

tplf-12th-congress.jpgEn la primera etapa, un grupo de funcionarios del TPLF/REST, pasando por comerciantes legítimos de grano, se acercarían a las numerosas ONG involucradas en la distribución de la ayuda alimentaria ofreciendo venderles cantidades de grano para la entrega rápida a las víctimas de la hambruna.

En aquel momento, el TPLF había adquirido y guardado en almacenes secretos gran cantidad de grano de diversas fuentes, incluidas ONGs, para uso de sus combatientes. Estas reservas de grano escondidas eran, de hecho, las que se ofrecían en venta a las organizaciones no gubernamentales. Los “comerciantes de grano” del TPLF/REST completarían la operación de venta y volverían a sus escondites con el pago de las ONGs.

En la segunda etapa, otro grupo de operarios del TPLF/REST se haría cargo de la responsabilidad de la entrega de la ayuda humanitaria en el interior de Tigrai. Para inspirar confianza a las ONG, funcionarios del TPLF/REST facilitarían controles sobre el terreno de las existencias de grano en sus propios almacenes secretos. Pero los almacenes estaban manipulados. Según un miembro de TPLF que fue testigo de la estafa, «si vas allí, encontraras la mitad de la bodega con sacos de arena». Los representantes de las ONG podrían realizar inspecciones visuales de los almacenes, dar su aprobación y cruzar de nuevo al Sudán para llevar a cabo compras adicionales de grano.

En la tercera etapa, el mismo o diferente grupo de funcionarios del TPLF/REST volverían a las ONGs y harían un nuevo ajuste de ventas adicionales de granos para entregarlos en otro lugar del Tigrai. Estas ofertas no incluían suministros nuevos de grano, sino que el grano almacenado ya en diferentes almacenes secretos en Tigrai eran transportados a nuevos lugares , dando la impresión a las ONG de que nuevos suministros de granos estaban siendo comprados y entregados. Dado que los trabajadores humanitarios no tienen medios para verificar de forma independiente que el grano que se transporta de un lugar a otro proviene de envíos totalmente nuevos, realizarían inspecciones superficiales y harían los pagos.

De esa manera, TPLF/REST fue capaz de vender y revender varias veces la misma reserva de grano (y arena) previamente adquirida a las organizaciones no gubernamentales generando así millones de dólares en ingresos. El TPLF/REST utilizo en 1985 diversas formas y técnicas para maximizar sus transacciones comerciales con las organizaciones no gubernamentales y vender cargamentos de granos enviados por barco por los países donantes.

En 2009, el Departamento de Estado de Estados Unidos se comprometió a investigar las denuncias de que «850 millones de dólares para ayuda en alimentos y para la lucha contra la pobreza provenientes de los EE.UU. era distribuido por el partido del primer ministro sobre la base de favoritismo político.»

Nunca se ha emitido ningún informe. (He desafiado USAID innumerables veces para que presenten el informe de la investigación sobre el uso del dinero de los contribuyentes estadounidenses para «favoritismo político» o reconocer el hecho de que los pirañas del TPLF han comido 850 millones de dólares de los contribuyentes estadounidenses mientras el personal de USAID se paseaba alrededor de lujosos hoteles bebiendo coñac y comiendo caviar.)

Hoy también el Gobierno de Estados Unidos ha optado por utilizar REST, la misma organización criminal, para la distribución de la ayuda alimentaria a los etíopes afectados por la hambruna.

Imagínense al Gobierno de Estados Unidos haciendo contratos de asociación a largo plazo (por tomar una comparación de la USAID en su relación con REST) con la Cúpula de la mafia siciliana para la distribución de la asistencia pública y servicios sociales para los pobres de las ciudades en América.

Los contribuyentes estadounidenses estarían indignados por tal acción de su gobierno. Pero, sin que lo sepan los contribuyentes estadounidenses, eso es exactamente lo que su Gobierno está haciendo con sus impuestos en Etiopia al asociarse con el T-TPLF.

Actualmente se está desplegando ante nuestros ojos un nuevo juego de engaño por el T-TPLF y sus donantes y prestamistas occidentales. Dicen que el hambre en Etiopía hoy está causada por cierto «personaje» llamado «El Niño». El T-TPLF y sus coconspiradores donantes y prestamistas occidentales dicen ahora que es El Niño («un calentamiento en las temperaturas superficiales del mar en el Pacífico ecuatorial que provoca lluvias inusualmente intensas en algunas partes del mundo y la sequía en otras partes»), pero El Niño no es hoy la causa de la hambruna en Etiopía.

Un tipo llamado Abraham Tekeste, un supuesto ministro menor del T-TPLF, citado por el reportero de Bloomberg residente en Etiopia dijo la semana pasada que el hambre es un producto del «efecto de El Niño » y como resultado «un crecimiento de alrededor del 10 por ciento sigue siendo alcanzable en los 12 meses a julio».

El reportero de Bloomberg no impugnó Tekeste en la falsa afirmación sobre «el crecimiento del 10 por ciento» que nunca ha ocurrido bajo el T-TPLF ni sobre el hecho de que El Niño tiene poco que ver con la explosiva hambruna actual.

Los fans del T-TPLF, algunos periodistas extranjeros residentes en Etiopía y otros en otras partes, continúan perpetuando descaradamente la GRAN MENTIRA sobre «el crecimiento económico de dos dígitos» en Etiopía.

He desacreditado, hace años, totalmente el bulo sobre «el crecimiento económico de dos dígitos» pero los periodistas extranjeros siguen repitiendo, sin pensar, esa mentira en un intento de aparecer periodísticamente correctos al T-TPLF.

Reto a cualquier periodista extranjero a refutar mi evidencia de que la reclamación del T-TPLF de crecimiento de dos dígitos es totalmente falsa. Demostré, más allá de toda duda, en mi artículo “El Banco Mundial y el ‘Crecimiento y Transformación’ de Etiopía” que la proclama del T -TPLF de un crecimiento de dos dígitos es una farsa mayor que un certificado de nacimiento de Bigfoot.

El Global Post afirmó: «Ellos [los etíopes] viven ahora el mayor crecimiento económico mundial, supervisado por un gobierno que ha reducido a la mitad la tasa de pobreza en 20 años a través del programa de protección social más grande de África.»

El Daily Nation, un periódico líder en Kenia informó recientemente, «Hoy en día, el crecimiento económico de casi dos dígitos en Etiopía y la enorme inversión en infraestructuras hace del país una de las economías de mayor éxito en África y un imán para la inversión extranjera». ¡Eso es simplemente falso, falso, falso!!!

Alemayehu G. Mariam

Tesfanews

* Alemayehu G. Mariam es profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Estatal de California y abogado ejerciendo en Los Ángeles.

@pal4thedefense

[Traducción Jesús Esteibarlanda]

[Fundación Sur]

Autor

Más artículos de Administrador-Webmaster
Por ti, por mí, trabajo decente

Por ti, por mí, trabajo decente

Manifiesto para la Jornada Mundial por el Trabajo Decente del 7 de octubre de 2024 En este décimo aniversario de la iniciativa Iglesia por el...