Yo no sé
como puedo rescatar el espíritu
de las canciones muertas.
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Como enriquecerme de la pérdida.
Como recordar y respetar esas relaciones ocurridas
sobre el suelo de los urinarios.
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Yo no sé
la undecima cosa
sobre Dios.
.
Que el abandono
llega con lunas ya oxidadas.
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Pero este es mi hogar,
donde es seguro
recolectar cañas de azúcar
.
y sacarte mocos
con los dedos de los pies…
.
Donde es seguro
olvidarse de
las malas hierbas.
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Quizá ver sangrar
a fantasmas del pasado…
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No sé cómo jugar,
como desenrollar
el símbolo de la cruz.
Como filtrar la eyaculación
con un fraude.
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Quizá abrazarnos,
desde el anochecer hasta el amanecer,
hasta que el viento
nos separe…
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Pero este es nuestro hogar,
donde dejamos nuestros corazones al descubierto
antes que cualquier otra cosa
.
Donde el amor
se encuentra en una carretera
demasiado lejana ya para deambular por ella.
