Muchas personas se asustan siempre del colesterol por ser un cuerpo químico nutriente que tiene efectos cardiovasculares.
Si bien es cierto que la alta cantidad de colesterol en la sangre puede conducir fácilmente a una mala función del corazón o insuficiencia cardíaca, el colesterol desempeña funciones vitales en nuestro sistema corporal. El colesterol es un lípido que ayuda en la formación de la bilis, un componente biológico importante de la digestión.
Es el responsable de la textura grasienta de la piel y hace el revestimiento exterior de las células de la piel. Es un importante esteroide, desde donde se producen las hormonas esteroides, así como la formación de vitamina D.
El colesterol es muy contributivo en la formación de las hormonas reproductivas como el estrógeno en las mujeres y la testosterona en los hombres.
El colesterol se produce generalmente en el hígado y proviene de diversos alimentos nutritivos que comemos. Es aconsejable disponer de un total corporal de colesterol de al menos 150mg/dl a 200mg/dl.
A veces se puede tener individuos con niveles de colesterol por debajo de 150mg/dl en condiciones saludables siempre y cuando se alimenten de una dieta vegetal que no afecte a sus concentraciones de colesterol en la sangre.
Mucho tiempo con niveles bajos de colesterol total en la sangre conducen generalmente a problemas adversos de salud del cuerpo, especialmente los vinculados a los desequilibrios hormonales en el cuerpo. Esto es porque el colesterol es muy contributivo en la fabricación de las hormonas esteroides y también las reproductivas. El colesterol total bajo también puede conducir a la depresión y al aumento de riesgo de accidente cerebrovascular.
Las personas con colesterol total bajo y con una mínima fuente externa de vitamina D, es también probable que puedan sufrir las consecuencias de deficiencia de vitamina D. Esto también nos recuerda que el sol es una fuente muy buena de vitamina D, ya que actúa sobre el colesterol que se encuentra en nuestras células de la piel para fabricar la vitamina D.
Hay dos moderadores importantes de colesterol total en el cuerpo; las lipoproteínas de baja densidad (LDL) y lipoproteínas de alta densidad (HDL). Estas dos importantes sustancias químicas del cuerpo, son siempre el tema central para los médicos, especialmente cuando tratan de ayudar a los pacientes con cardiopatías coronarias.
Las lipoproteínas de baja densidad y (LDL) y las de alta densidad (HDL) son las lipoproteínas que transportan el colesterol en la sangre.
Los médicos, por lo general se centran más en las proteínas de baja densidad de lipo, porque transportan el colesterol a las arterias y las personas con enfermedad cardíaca coronaria, están normalmente en peligro si este portador de colesterol es alto en la sangre.
En la enfermedad coronaria, en general, encontramos coágulos de sangre dentro de las paredes de las arterias. Esto a su vez limita o bloquea la circulación de la sangre en las cavidades del corazón, y causa un mal funcionamiento o insuficiencia cardíaca.
Ahora, si usted tiene más de LDL que lo normal que transporta el colesterol en las arterias, la situación puede empeorar.
Las lipoproteínas de alta densidad (HDL) no son peligrosas en comparación con las de baja densidad, porque transportan el colesterol desde las arterias hasta el hígado.
El patrón de alimentación o dieta es muy contributivo a la formación de colesterol en el cuerpo. Muchos de los productos de origen animal o grasas, han visto aumentar la cantidad de colesterol en el cuerpo y actualmente, es por eso que se recomienda a las personas con enfermedad cardíaca coronaria, limitar los productos alimenticios de origen animal como la carne, el queso, entre otros.
Para mantener en nuestra dieta un colesterol bueno. Usted necesita alimentarse de alimentos vegetales como pequeñas cantidades de nueces y semillas, legumbres, frutas, granos enteros y verduras.
Las grasas vegetales tienen un efecto mínimo sobre las contribuciones de colesterol y la dieta vegetal con aguacate, coco, y aceitunas son aconsejables.
Joseph Kamugisha
The New Times (Ruanda)
* El Dr. Joseph Kamugisha es residente de oncología en Jerusalén.
