La Unión Africana (UA) ha hecho un llamado firme para la eliminación inmediata e incondicional de las sanciones unilaterales que afectan a Zimbabue. En su comunicado señala que estas medidas coercitivas, impuestas por países occidentales, son injustificadas, han perdurado por más de dos décadas y constituyen un serio obstáculo para el desarrollo socioeconómico de Zimbabue. Explica también que dichas sanciones han limitado gravemente el acceso del país a financiación internacional, a la vez que han desincentivado la inversión extranjera directa y han elevado los costos de hacer negocios, lo cual frena el desarrollo del país e imposibilita los esfuerzos regionales para alcanzar los objetivos del plan continental Agenda 2063 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas; además de la estrategia nacional de Zimbabue (Visión 2030) y la integración de la región en la Comunidad de Desarrollo de África Austral.
Si bien la Unión Europea ha relajado este año las sanciones contra el país, a través de la retirada de sanciones individuales, se ha mantenido vivo el marco jurídico de restricciones hasta 2026 (para poder volver a endurecer las medidas si es necesario) y el embargo de armas. El presidente de Zimbabue,Emmerson Dambudzo Mnangagwa, ha insistido en que el levantamiento de las sanciones debe ser total e incondicional. Por otro lado, países como China y Rusia ya han expresado su respaldo a la solicitud de eliminación de sanciones
Durante las conmemoraciones del Día contra las Sanciones, celebrado en Harare el pasado sábado, Mnangagwa declaró que se habían adoptado modelos nacionales de financiación del desarrollo para impulsar el progreso de Zimbabue. Durante su intervención, insistió en que la solución y la mejoría de la situación de su país tiene que venir de ellos mismos, sin depender de actores externos, y trabajando por una modernización e industrialización de su economía.
[CIDAF-UCM]