Reduciendo la brecha nutricional: Un llamamiento a la acción para las víctimas de quemaduras en Etiopía

12/09/2025 | Crónicas y reportajes

Más del 75 % de los pacientes con quemaduras graves pierden hasta una cuarta parte de su peso previo al ingreso y terminan desnutridos.

Las quemaduras son un grave problema mundial, que causa alrededor de 180.000 muertes al año, principalmente en países de ingresos bajos y medios como Etiopía. Las quemaduras no mortales suelen causar largas estancias hospitalarias y graves problemas de salud.

Amar, por ejemplo, un niño de siete años de la zona rural de la región de Oromia, sufrió quemaduras graves en la cabeza, la cara y la espalda al volcar accidentalmente una olla.

En tan solo dos semanas, perdió 12 kilos y pasó más de 100 días hospitalizado, sometido a múltiples cirugías, bajando su peso de 21 kg a 9,7 kg en su peor momento. Una nutrición adecuada puede ayudar a pacientes con quemaduras como Amar para estar más pronto  en condiciones para la cirugía, recibir las cirugías que les salvarán la vida y para iniciar su recuperación rápidamente. Una pronta recuperación ofrece a las víctimas de quemaduras como Amar la oportunidad de llevar una vida relativamente normal y productiva. Desafortunadamente, el acceso a los servicios nutricionales adecuados sigue siendo un obstáculo importante para los pacientes con quemaduras en Etiopía.

Las quemaduras graves como la de Amar aumentan drásticamente las necesidades de nutrientes y energía del cuerpo, a veces incluso duplicando estas necesidades cruciales. Sin una nutrición adecuada, los pacientes con quemaduras pueden sufrir una pérdida de peso significativa y complicaciones graves de salud, lo que dificulta su recuperación.

Etiopía cuenta con cinco unidades públicas de quemados, con solo 74 camas para más de 100 millones de personas. Estas unidades, insuficientemente equipadas, se enfrentan a la falta de suplementos nutricionales especializados y de personal capacitado en nutrición. El personal hospitalario a menudo intenta aumentar el contenido calórico de las comidas añadiendo huevos y leche, pero esto no es suficiente para satisfacer las necesidades nutricionales adicionales de las víctimas de quemaduras. Normalmente, necesitan el doble de calorías que las personas sanas, así como dietas ricas en carbohidratos y proteínas para una recuperación óptima.

Como cirujano plástico especializado en el cuidado de quemaduras en Etiopía, doy fe de que más del 75 % de los pacientes con quemaduras graves que atiendo en las unidades de quemados pierden hasta una cuarta parte de su peso previo al ingreso en 2 o 3 semanas y terminan desnutridos. Los pacientes que reciben una buena nutrición responden mejor al tratamiento, se recuperan más rápido y demuestran mayor resiliencia a los múltiples tratamientos a los que suelen ser sometidos, en comparación con los pacientes desnutridos.

Ethiopia’s Food and Nutrition Policy (Política de Alimentación y Nutrición, FNP por sus siglas en inglés), establecida en 2018, tiene como objetivo garantizar la seguridad alimentaria y nutricional. Ha contribuido a reducir de forma constante el retraso del crecimiento en las últimas dos décadas, del 58 % en 2000 al 34 % en 2022. A pesar de éste y otros programas nacionales de nutrición, las necesidades nutricionales específicas de los pacientes con quemaduras graves siguen sin estar cubiertas. Si bien es esencial centrarse en la desnutrición primaria, también debemos considerar la desnutrición secundaria causada por quemaduras, traumatismos y enfermedades.

En 2022, el Ministerio de Salud introdujo directrices para el apoyo nutricional en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), pero estas no abordan las necesidades específicas de los pacientes con quemaduras en las unidades de quemados de Etiopía. Las víctimas de quemaduras se ven aún más marginadas por la falta de una política nacional que atienda sus necesidades específicas. Esta desatención afecta su acceso a la nutrición e influye en su atención general, que abarca desde apósitos especializados hasta atención quirúrgica y tratamiento especializado. Por lo tanto, el Ministerio de Salud de Etiopía necesita urgentemente una política integral de atención a las quemaduras que rija y guíe estas intervenciones.

Mientras tanto, necesitamos alianzas entre organizaciones nacionales e internacionales de nutrición y hospitales con unidades de quemados para proporcionar alimentos terapéuticos listos para usar (ATLC). Los ATLC pueden salvar vidas a los pacientes desnutridos con quemaduras, a la vez que alivian la carga sobre los recursos gubernamentales.

Los ATLC se elaboran según una composición estándar rica en energía definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Los ATLC de categoría industrial también se producen en Etiopía y tienen un bajo contenido de humedad y una larga vida útil sin necesidad de refrigeración. No requieren preparación, lo que los convierte en una alternativa ideal en entornos con recursos limitados, como las unidades de quemados estatales, donde no es posible obtener preparaciones nutricionales especiales.

Estos enfoques pragmáticos pueden ser de gran ayuda para víctimas de quemaduras como Amar, quien, en zonas remotas, necesita acceso seguro y de calidad a la nutrición y a la atención quirúrgica. Amar y muchas otras víctimas de quemaduras merecen sanar, sobrevivir y recuperarse. Por lo tanto, los miles de pacientes que sufren quemaduras graves merecen una Política Nacional de Atención de Quemados y mejoras tangibles en sus procesos de atención y recuperación, que les permitan convertirse en ciudadanos sanos y productivos.

Metasebia Worku Abebe

Fuente: African Arguments

[Traducción, Jesús Esteibarlanda]

[CIDAF-UCM]

 

Autor

  • Doctora y profesora asociada de Cirugía Plástica y Reconstructiva. Dirige la Unidad de Cirugía Plástica y Reconstructiva del Hospital Saint Paul Millennium Medical College, en Adís Abeba, Etiopía. Supervisa la Unidad de quemados del Hospital AaBET, una filial del Saint Paul Hospital Millennium Medical College. (Fuente: African Arguments).

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