Los malos olores de los que se quejaban los aldeanos de una zona de la República Democrática del Congo (RDC) han llevado al descubrimiento de una fosa con centenares de cuerpos en el cementerio Fula-fula.
El descubrimiento ha sido facilitado por la Misión de la ONU en la República Democrática del Congo (MONUSCO) y ya se han identificado 425 cuerpos enterrados “con prisa” en una misma fosa. Las autoridades de Kinshasa parecen encontrarse en el centro de este asunto, y el Primer Ministro y el Ministro del Interior y de Seguridad han afirmado que los cuerpos son de “pobres, guardados durante largo tiempo en la morgue central del Hospital general de Kinshasa y enterrados por el ayuntamiento”. Pero, si este es el caso, los ciudadanos se preguntan por qué no se ha informado antes de la existencia de este pozo.
Para la mayoría de los congoleños este caso debe aclararse cuanto antes, ya que en el país existen muchos manifestantes políticos que han desaparecido a lo largo de los años y el rumor de que se encuentren en esta fosa recorre impaciente las mentes de los ciudadanos.
Maria Babia
GuineaConakry.info – Fundación Sur