El cuerpo nacional de policía de Zimbabue ha identificado los cadáveres de los siete trabajadores que perdieron la vida en una mina localizada en Gwanda, en la provincia de Matabeleland, en el sur del país. La mayoría de los fallecidos tenían menos de treinta años de edad, excepto uno de ellos que tenía cincuenta y nueve.

Las investigaciones han confirmado que los cables mediante los cuales era traccionada la jaula en la que subían los siete trabajadores, que habían finalizado su turno, cedieron al peso que soportaban precipitando a las siete personas al vacío, en una caída de alrededor de 200 metros. Los equipos de rescate necesitaron drenar todo el agua que se encontraba en el fondo del pozo por el que cayeron los trabajadores, para poder recuperar e identificar los cuerpos ya sin vida. También ha sido revelado que el accidente pudo haber sido una negligencia, debido a la baja capacidad de las jaulas que están siendo utilizadas.

La policía ha solicitado a la empresa de explotación de recursos naturales que extremen todas las precauciones y las medidas de seguridad, así como aquellas de carácter medioambiental y sanitario. Por su parte, la empresa minera ha clausurado la explotación y ha reforzado los efectivos de seguridad para tener un control aún mayor de las entradas y salidas de la mina.

Fuente: New Zimbabwe.com- Mbekezeli Ncube

[Traducción y edición, Mario Civantos González]

[CIDAF-UCM]

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