![]() |
![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]()
Búsqueda personalizada
![]() ![]()
![]()
|
Inicio > REVISTA > Opinión > ![]() ![]() Peter Dörrie Periodista especialista en política de recursos y seguridad en África. Autor en @PDMedien, productor del podcast @wpreview, editor de de Boletín Africa Insiders de @africaarguments. @peterdoerrie peterdoerrie.com Imagen: Peter Dörrie twitter Aventuras turcas en costas africanas
14/01/2020 - Lo esencial: el parlamento turco aprobó la semana pasada el despliegue de tropas en Libia para apuntalar la coalición que mantiene a la capital, Trípoli, y al gobierno reconocido internacionalmente contra las milicias apoyadas por Rusia y naciones árabes. Esto marca una creciente escalada de intervención extranjera en Libia y socava aún más las esperanzas de un rápido alto el fuego. El contexto: el autodenominado Ejército Nacional de Libia (LNA) del general Haftar intensificó un enfrentamiento político que tiene lugar desde hace tiempo entre el Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA), reconocido internacionalmente, y su administración rival, con sede en la ciudad oriental de Tobruk, cuando comenzó una ofensiva para capturar Trípoli en abril de 2019. En lugar de lograr una victoria rápida
Ambas partes han sido apoyadas continuamente por actores externos. Haftar ha recibido especialmente ayuda militar cada vez más abierta de Egipto, Arabia Saudita, Rusia y los Emiratos Árabes Unidos, que va desde armas y municiones hasta apoyo aéreo y asesores militares. Los partidarios del GNA, como Turquía, han proporcionado ayuda similar, aunque menos destacada. El despliegue abierto por Turquia de fuerzas militares regulares representa, por lo tanto, un lógico pero nuevo nivel de escalada. Con ataques aéreos diarios, parece solo cuestión de tiempo que las fuerzas turcas experimenten bajas, incluso si no se despliegan directamente en las líneas de frente. Si los que apoyan el LNA reaccionan con similares despliegues, esto podría provocar que las tensiones sobre el futuro de Libia se manifiesten en el Medio Oriente y Turquía, que tampoco son las regiones más estables. Lo positivo: la participación de Turquía arroja un indispensable refuerzo militar al GNA, que ha estado a la defensiva contra las mejor equipadas fuerzas del LNA y sus aliados. Si bien ambas partes han cometido atrocidades en los últimos años y se basan en una cuestionable legitimidad política, Haftar y sus aliados son los personajes menos fiables y han sido los principales obstaculos para una solución pacífica. Lo negativo: Aunque estabilizándose potencialmente la posición del GNA, el despliegue turco en realidad no resuelve nada. Además, ha llevado a una condena generalizada por parte de los críticos habituales de la política exterior turca, incluidos estados de la UE como Italia y Grecia, lo que implica el peligro de convertir los problemas de Turquía en los del GNA. El futuro: aunque poco realista en este momento, Libia es un claro caso para una misión internacional de mantenimiento de la paz que reduciría la tensión de la situación y permitiría el espacio necesario para una negociación sobre un acuerdo político. Por el momento, parece que las fuerzas en Libia y sus patrocinadores están interesados en tratar de resolver el conflicto por la fuerza, lo cual es un mal augurio para los millones de civiles que se encontrarán en peligro. Peter Dörrie Fuente: African Arguments/Africa Insiders [Fundación Sur]
Comentarios
Las opiniones expresadas en estos comentarios no representan necesariamente el punto de vista del CIDAF-UCM. El CIDAF-UCM no se responsabiliza de las opiniones vertidas por los usuarios
|
Salvo que se indique lo contrario, el contenido de este sitio tiene una licencia Creative Commons Attribution 4.0 Internacional
Aviso política informativa | Política de cookies