Jean-Jacques Purusi, gobernador de la provincia de Kivu Sur, en la la República Democrática del Congo (RDC), informó que las fuerzas rebeldes del M23, apoyadas por Ruanda, habían logrado tomar el domingo 16 de febrero el control de Bukavu, la capital de la provincia.
A finales del mes de enero, el grupo paramilitar ya había logrado capturar la ciudad de Goma, la capital del la vecina provincia de Kivu Norte, y llevaban desde entonces avanzando de forma continuada en dirección sur, rodeando el lago Kivu, hacia Bukavu. De hecho, un día antes de los acontecimientos, se anunció la toma del aeropuerto de Kavumu, que daba acceso a la ciudad. Según informes, las Fuerzas Ruandesas de Defensa (RDF) y el M23 solo han tenido que hacer frente a una resistencia mínima durante su avance.
El gobierno de la RDC confirmó la noticia, añadiendo que entre los rebeldes se encontraban tropas procedentes de Ruanda. No obstante, en el comunicado emitido no se expresó que estuviera toda la ciudad completamente capturada.
“Ruanda sigue perseverando en su plan de ocupar, saquear y cometer crímenes y graves violaciones de los derechos humanos en nuestro territorio”.
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Reino Unido declaró:
“El Reino Unido pide el cese inmediato de las hostilidades, la retirada de todas las RDF del territorio congoleño y el retorno al diálogo a través de procesos de paz liderados por África. No puede haber una solución militar”.
Fuente: Al Jazeera
[Traducción y edición, Julia Vicente]
[CIDAF-UCM]